Serie Elite
SpitFire®

El sistema de cubo de la hélice Flo-Torq podría ser la parte más importante que nunca se ve. No sólo se flexiona al hacer los cambios, lo que reduce el ruido y la vibración. Si su hélice golpea un objeto bajo el agua, se sacrifica para salvar a su unidad inferior. Simplemente inserta un cubo de hélice nuevo e inmediatamente esté de regreso en el agua, sin llamadas de servicio necesario. El sistema de cubo Flo-Torq también hace hélices marca Mercury compatibles con la mayoría de los motores en el mercado mientras que también proporciona protección contra la corrosión incomparable.

No pudimos encontrar una aleación de aluminio lo suficientemente buena para nuestras hélices. Así que inventamos una: el aluminio Mercalloy. Tan único que está patentado, Mercalloy hace piezas de fundición de mayor resistencia. Lo que permite palas más finas que crean menos fricción. ¿El resultado? Óptimo rendimiento, durabilidad óptima, mejor navegación.

¿Cómo se hace una hélice Mercury®? Un exigente paso a la vez. Comienza con un molde, realizado en cera caliente especialmente diseñada, utilizando una técnica de 5.000 años. Reforzado con dos acabados cerámicos en un proceso de aplicación que lleva dos días completos. Calentados por vapor en un autoclave a 325 grados Fahrenheit y 100 PSI de presión. Y por último, puestos en hornos de precalentamiento a más de 2000 grados Fahrenheit - un calor que exige que los empleados usen ropa de protección aluminizada. Fortalecido y a prueba de golpes, el molde está listo. Se llena la cavidad con acero inoxidable líquido, calentado a 3000 grados y distribuidos en gotas de 50 libras. Pasan quinientas libras de metal fundido, creando 24 hélices Mercury. Las hélices recién hechas se enfrían en repisas durante aproximadamente una hora. A continuación, máquinas tipo martillo, sierras abrasivas y ejectores de arena eliminan todos los restos de cerámica residual y oxidación. Los maquinistas afinan y preparan las hélices para aplicaciones específicas. Las amoladoras afinan los bordes de la pala y lijan otras áreas. Siguiente paso: refinamiento de la superficie. Dos horas en una máquina arrastre acabado suaviza los picos y los valles, creando el acabado mate de un Bravo Three® o una hélice POD. Otras hélices pasan a una etapa de pulido, obteniendo un alto brillo. El paso final es ponerle a las hélices clavijas con Sistema de Ventilación de Rendimiento. Ahora están listas para ser personalizadas para una mejor horquilla y para ofrecer el rendimiento superior que los propietarios de Mercury de todo el mundo esperan.

Mercury transforma aluminio y acero inoxidable en la más alta calidad, con mejor desempeño, y hélices marinas más duraderas del mundo. También son las de mayores ventas, lo cual no es una sorpresa. Nuestra experiencia, conocimiento y tecnologías patentadas - Flo Torq®, Mercalloy®, aleación X7® y PVS® (rendimiento del sistema de ventilación) - le dará una verdadera ventaja competitiva. Para un mejor rendimiento general del barco, no hay sustituto para una hélice de Mercury.